Entrevista publicada en la Revista de 2018
Los pregoneros son uno de los mayores activos con los que cuenta la hermandad, ya que han sido ellos y seguirán siendo en el futuro los que transmiten la palabra de la devoción y la fe del Señor, a través de sus letras escritas con gran cariño y sentimiento, llenas de vivencias y emociones sentidas y sufridas bajo el seno de la Vera + Cruz. Es por ello, que en el décimo aniversario de nuestro pregón queríamos hacer un pequeño homenaje en favor de estos hermanos, que tanto han dado y seguirán dando a nuestra ilustre y fervorosa hermandad.
1.- Ha pasado el tiempo, y el pregón forma ya parte del pasado, ¿Cómo resumirías la sensación que viviste antes, durante y después de dar el pregón?
Creo que a nivel de sensaciones pude experimentar un abanico muy amplio de todas y cuantas pueden recorrer el cuerpo de una persona, sin embargo, hubo una que prevaleció sobre todas las demás, y es la del deber cumplido, la de la satisfacción de haber hecho todo lo que estuvo en mi mano por la hermandad que me vio nacer. Eso no tiene precio, y la Santa Vera + Cruz me dio la oportunidad de vivirlo.
2.- Las imágenes, los músicos, los penitentes, costaleros, mantillas, etc, forman parte de un cortejo que todo pregonero nombra en su pregón, sin embargo ¿Con qué figura te sientes y te has sentido más identificado a lo largo de los años?
Conozco a la hermandad y la Semana Santa, yo diría que, desde la piel de la mayor parte de actores que forman la misma, sin embargo, ninguna me causó la cantidad de emociones y sentimientos como lo hizo la figura del costalero. Creo que es una experiencia que traspasa lo físico y material y que te acerca a lo Divino de manera exponencial.
3.- Es difícil por lo enigmático y singular de nuestra Semana Santa, catalogar nuestra fiesta más grande, pero realizando un esfuerzo nos gustaría que definieras en pocas palabras, que significa la Semana Santa para ti.
Puede que para algunos sea una fiesta, para otros unos días de descanso, incluso puede que para alguien sea un momento ideal para escapar de la rutina, sin embargo para mí, la Semana Santa significa acercarme de manera extraordinaria a Dios y su madre y compartirlo con mis vecinos y amigos allí donde todo el mundo se atreve, en la calle.
4.- La Semana Santa es sin lugar a dudas, la fiesta de mayor calado e importancia en nuestra población, sim embargo ¿Crees que las hermandades, actoras principales de la fiesta, tienen el valor y reconocimiento que se merecen?
Somos muchos los que creemos que las hermandades son un elemento de cohesión y autentico eje vertebrador de la sociedad de Setenil, no obstante, su influencia e importancia no son directamente proporcionales a su reconocimiento y valoración, o al menos no de forma pública y notoria.
5.- Todos los miembros de una hermandad, tienen momentos donde están más cerca y momentos que por circunstancias están más alejados de sus hermanos y compañeros de hermandad, sin embargo, al final en los momentos trascendentales, siempre nos encontramos ¿Crees tú que la fe es lo que nos mantiene unidos, durante toda nuestra vida?
Al igual que el emigrante siempre acaba volviendo al origen de sus raíces y al pueblo que le vio nacer, los hermanos de la Vera + Cruz, siempre nos mantendremos unidos bajo el manto de la hermandad, forjado por la Fe y la cohesión del calor que proveen las experiencias vividas y las emociones y sentimientos compartidos de forma mutua y fraterna.
6.- Son muchos los lugares y posiciones desde la que se puede vivir la hermandad y la Semana Santa, pero según tu importante criterio, y desde la experiencia que te dan tus vivencias, por favor, comparte con nuestros lectores, ¿De cuál guardas un mayor y agradable recuerdo?
He tenido la suerte de poder disfrutar de muchas y diferentes experiencias en la hermandad, todas agradables y enriquecedoras, si bien, me gustaría expresar que el auténtico placer y honor me lo reporta el simple hecho de pertenecer a esta gran familia, sea en el lugar que sea y desde la posición que me toque en cada momento. He intentado disfrutar del puesto que me ha tocado ejercer en cada momento y con la medalla colgada en el pecho, casi siempre inclinada hacia el corazón, me siento feliz y honrado de poder decir libre y en voz alta, que la verdadera experiencia es pertenecer a esta gran familia, llamada Vera + Cruz.
