Ismael Sarmiento compone las marchas «Reina y madre de la Villa» y «Amarrado a tu columna» para Los Blancos

PEDRO ANDRADES

Con un tambor ronco recuerda los latidos de los corazones de los setenileños ante el esperado inicio de la Semana Santa. Con sones de trompetas evoca los murmullos de la gente. Las campanas nos traen la algarabía de los niños antes de la procesión que está a punto de salir. Un solo de flauta se funde con la plegaria de la Virgen. Así son las partituras de pasión de nuestro vecino Ismael Sarmiento, un joven compositor arriateño de 29 años asentado en la Cantarería, que ha creado marchas procesionales para el Amarrao y la Virgen de los Dolores de Los Blancos. En el siguiente audio puedes escuchar la marcha «Reina y madre de la Villa», interpretada por la Banda Juan Aguilar de El Bosque, que se estrenará este Jueves Santo en la calle Cádiz..

Ismael Sarmiento comenzó a los 14 años tocando el bombo. Cuando se cansó de «dar porrazos», se pasó a la trompeta y el fliscorno, y empezó a crear sus propias melodías en el pentagrama. Su primera composición fue para el nazareno de Benahadux (Almería). Con el maestro Eloy García y su «Virgen del amor doloroso» como referentes musicales, cuenta ya con más marchas registradas (una treintena) que años. La mitad de ellas ya las ha estrenado. Y, gracias a su generosidad y trabajo, la Semana Santa de Setenil se marcará el lujo de contar con marchas propias marcando con tambores, palilleras y trompetas el camino de la pena y las mecidas de nuestras dolorosas avanzando por las calles más hermosas de la Semana Santa de Andalucía. Hay que tener mucho talento y mucha pasión musical para generar esta ingente obra alternando el trabajo en el taller con la creación artística y, más aún, cuando el mérito proviene del estudio autodidacta. ¡Qué grande eres Ismael!

PARTITURA DE «REINA Y MADRE DE LA VILLA»

«En la noche del Jueves Santo, de vuelta por la calle Constitución, llegamos a la recta final de su recorrido oficial por las calles de Setenil. Corte de aro de tambores para dar entrada con fuerza a su obra, donde setenileños, acompañándola en su pena, ven a su madre avanzar lentamente por sus calles.

Llegando al tema principal de la pieza, comenzamos con un piano encabezado por los instrumentos de viento madera de la banda, guiando estos el compás de la mecida del paso de palio de NuestraVirgen de los Dolores. Llegamos desde un esforzando de piano hasta un forte con aire trianero para su subida a doble paso. Nuestra madre y reina es mecida hasta la plaza con las últimas fuerzas de los horquilleros tras su arduo camino.

Con ese aire trianero en piano, antes del arco de la Villa, Nuestra Señora de los Dolores, en sus últimos pasos acompañando a su hijo, cambia el modo de la música a un ritmo rociero con su solo de flauta en modo de plegaria. Suena el ruego por su pueblo, consciente de lo bello vivido el Jueves Santo. Al terminar esa plegaria, a contestación de un solo de trompeta, entramos en el final de la marcha, siendo recreado el paso de palio pasando por su arco para terminar rompiendo en un forte con la llamada de las trompetas. Estas representan la conversación de María con su hijo, nuestro Señor “Amarrado a la Columna”.

PARTITURA DE «AMARRADO A LA COLUMNA»

«Setenil, durante la tarde del Jueves Santo y con acorde triunfante en la tonalidad de Lab Mayor, inicia esta pieza a sones de trompetas, reflejando los murmullos de la gente. Va sonando un tambor ronco que imita los latidos de los corazones todos los setenileños, emocionados al saber que pronto comenzará el momento soñado. 

Salta un nuevo motivo: la introducción del bombardino  y de las campanas, que significan la llegada de todos los jóvenes blancos al arco de la Villa. Ellos esperan esa ansiada salida procesional con nerviosismo, reflejado en las notas agudas de las cornetas, marcando finalmente que su Señor “Amarrado a la Columna”  hace acto de presencia en el patio de la Villa.

Seguimos avanzando por las líneas de este pentagrama, escrito con agrado e ilusión, para mostrar el tema principal de la obra. Tras un cambio triunfante, a toques de palilleras y ocho tiempos de platos, recrea el suave suspiro de los horquilleros durante las dulces mecidas a paso lento que llevan a Nuestro Señor con tanta devoción.

A continuación, pasamos a la parte fuerte donde muestra el sacrificio y el esfuerzo que tienen que realizar nuestros horquilleros al llegar a la parte donde se realza la mayor tensión de la procesión. Esa estrechez donde, con las indicaciones de nuestros capataces, los guían para la difícil maniobra. Al acabar, llega ese solo de trompeta que da comienzo en el tramo de la calle Cádiz, haciendo saber así al pueblo de Setenil de las Bodegas que su Señor “Amarrado a la Columna” inicia sus andanzas por las calles del pueblo blanco. Por último,  llegamos a la parte final de la pieza, nuestro trío que, a través de una introducción de palilleras, Nuestro Señor se mece entre los devotos hasta que resuena a modo de sorpresa un forte con las cornetas y el contrapunto del bombardino, marcando que no va solo en su recorrido; sino que camina tras él la “Reina y Madre de la Villa».

OTRAS COMPOSICIONES DE ISMAEL SARMIENTO

Marcha dedicada a Jesús de la Humildad y Paciencia de la Hermandad de la Coronocación de Almería, obra de Ismael Sarmiento.

Los Regulares en Setenil: una historia de hermandad

ANTONIO VARO GUTIÉRREZ
Coronel de Infantería DEM. Jefe del Grupo de Regulares de Ceuta Nº 54

Publicado en la Revista de 2016

Si algo me llamó la atención el pasado año, cuando por primera vez como Jefe del Grupo de Regulares de Ceuta pude participar en la preciosa, apasionada y sublime Semana Santa de Setenil de las Bodegas, fue la mirada de amistad, agradecimiento y admiración que pude ver en todos los hermanos y hermanas “blancos” que tuve el honor de conocer. Sé que ello que no se debe a mi persona, sino a lo que represento: la historia de hermandad entre los setenileños y los Regulares de Ceuta.

No pretendo dar una lección sobre la historia de la colaboración entre la unidad militar que tengo el honor de mandar y la Hermandad de la Santa Vera+Cruz. En cambio, sí me gustaría escribir unas letras sobre lo que entiendo por “hermandad”. Quizás este concepto, idea o como queramos llamarlo, represente la forma más antigua mediante la cual hombres y mujeres pertenecientes a cualquier  estamento social o institución, se aglutinaban entorno a un fin común, utilizando para ello la forma más genuina de lo que llamamos “democracia”. La misma palabra hermandad hace referencia a “igualdad”, “amistad”, “alianza” o “fraternidad”.

Los primeros cristianos se agruparon de ese modo; daba igual que fueran nobles oplebeyos, ricos o pobres. Con el paso de los años y con la finalidad de mantener vivo el sentimiento de la Fe, los cristianos se organizaron en cofradías o hermandades. Con el costal encima y mirando difícilmente al frente, se unen obreros, abogados, políticos o militares. No hay diferencia. Todos a la una. Ante Nuestro Señor no hay diferencias.De esta manera es como siento la unión entre los “Blancos” y el Grupo de Regulares de Ceuta nº 54, de igual a igual y de mutua admiración.

 Por cuestiones del destino, los Regulares, unidad de clara tradición africana  acompañan a los bellos Pasos de la Cofradía de la Santa Vera + Cruz por las blancas calles de Setenil. Aunque algunos piensen que es sólo algo estético, yo pude ver algo más. Algo que va más allá de lo sencillamente terrenal. Mis hombres y mujeres pudieron sentir la admiración y agradecimiento del pueblo. De ese pueblo que venera y reza a Nuestro Señor y a su Madre, la Virgen María, con una maravillosa y eterna devoción. Fue en ese momento donde pude ver claramente la “hermandad”  entre ese pueblo y mis soldados.

Por ello pido a Dios que esa Fe generosa que vi derrochar por las calles de vuestro precioso pueblo, cuide de todos aquellos Regulares caídos por España, independientemente de su religión o creencia, y proteja y guíe  a todos aquellos que actualmente forman en las filas de esta gloriosa unidad.

Para terminar y desde la humildad de estas letras, quisiera dar la bienvenida a esta Hermandad a quien se ha integrado recientemente como Hermano Mayor Honorario, S.M.el Rey, don Felipe VI. Es un alto honor para el Grupo de Regulares de Ceuta nº54  compartir este título honorífico con nuestro Jefe Supremo.